Más vale vivirlo que contarlo: esa es la esencia que hace que el marketing experiencial funcione. En lugar de venderle algo a los consumidores y en lugar de intentar convencerlos de alguna realidad o de algún principio se hace que ellos mismos los descubran viviéndolo.
¿Pasa una semana sin que aparezca o se haga más visible una nueva tendencia dentro de lo que los influencers hacen para llamar la atención de las marcas? No, y en realidad casi se podría decir que de los influencers y de sus acciones para posicionarse de un modo llamativo para la industria cada día se saben nuevas cosas y cada día se aprende sobre su última y nueva moda.
Son cada vez más las marcas que suman el canal digital a su estrategia de venta, pero ¿por qué sucede esto? Porque el avance de la tecnología llevó a que surgieran nuevas alternativas para brindar una mejor experiencia al consumidor.
Es un hecho: el público detesta la publicidad como la conoce. Los consumidores están cansados, hastiados de ser blanco de un sinfín de anuncios que muestran el único y evidente propósito de obtener algún beneficio de ellos. ¿Cómo, entonces, debería actuar una marca ante este inminente rechazo?
Puede que hasta hace unos años, todo lo que se relacionaba solo con el audio se viese como un elemento de alcance en cierto modo limitado. Al fin y al cabo, el audio era la radio y la radio llevaba unas cuantas décadas en una situación un tanto complicada.
En los últimos años, los responsables de marketing han comprendido que el marketing de contenidos es una pieza clave en su estrategia.
En la estrategia de negocios y en el trabajo de posicionarse ante el cliente y «ganarlo», el marketing es una pieza clave.
Llegar a los consumidores es la gran obsesión y preocupación de las marcas y de las empresas y, en ello, siguen siendo cruciales herramientas que se han convertido en ya casi tradicionales en el marketing online.
En los últimos años, los contenidos se han convertido en una pieza fundamental de los servicios que ofrece la red y también de lo que es ya lo favorito de los ciudadanos a la hora de consumir.
Durante años, mientras las redes sociales iban haciéndose más y más populares y el uso que las marcas y las empresas hacían de ellas iba en aumento, se fue repitiendo el mensaje de que, frente a su gran crecimiento, el email marketing iba a quedar obsoleto.
